De fiestas y rabietas

Marzo me toma por sorpresa. En medio de días agobiantes y calurosos me toman de imprevisto algunos cumpleaños (incluso el mío) y empiezo a sentir que la vida se me escapa trabajando y tratando de entenderme.

De pronto este mes es mejor que el anterior, empiezo a hacer recuento de las cosas importantes y las no tan importantes y encuentro que todo está tomando una estabilidad saludable. Decido entonces hacer una fiesta, no solo por mi cumpleaños, sino también porque creo que me merezco un poco de diversion después de estar muchos días anémico de farras y de presupuesto.

Y todo sale bien, la fiesta es un éxito, todo marcha normal.. hasta que entro a la página del CNE para verificar si ya me hicieron el cambio de domicilio y me encuntro con la sorpresa de que fui designado presidente de Junta. De repente siento ganas de gritar y de tomar a los del CNE y mandarlos a la mierda...

Con que derecho estos burocratas dañan mi domingo (que de por sí siempre son malos), No les basta con obligarme a votar sino que ahora tengo que contar los votos? !Fuck!... yo ya tenía planes.

Alguien sabe alguna manera formal de sacarse la vuelta?

El nuevo spot de la revolución...

Hey Jude es una canción hermosa. La escribió Paul McCartney allá por 1968 para Julian Lennon, hijo de John Lennon. Tenía el propósito de consolar al pequeño (aunque éste supo recién 20 años después que la canción fue escrita para él) que estaba viviendo el terrible y muy publicitado divorcio de sus padres. Originalmente iba a llamarse Hey Jules, pero luego McCartney cambió por Hey Jude porque sonaba mejor. La canción es una joya musical por su melodía y especialmente por su letra: una oda a la esperanza y al positivismo.

Ahora "Hey Jude" ya es de todos.

Lo primero que pensé cuando escuché el nuevo spot publicitario del gobierno fue: !que mierda! ahora no podré escuchar la famosa canción de The Beatles sin que se me venga a la mente Correa y su revolución ciudadana, y esto (la revolución ciudadana) es algo que aún no me termina de convencer.

La canción servirá de comodín en época de elecciones, se dirá que no es propaganda del presidente-candidato sino un spot para motivar al pueblo, eso es lo de siempre. Lo que realmente me molesta no es eso, porque con canción o sin ella Correa ganará "Largo y tendido" ese mal chiste llamado elecciones en el que al parecer no hay mejor opción que él, lo que me enfurece es que hayan jodido la canción.

¿Qué pensará Paul McCartney acerca de su aclamada obra ahora convertida en instrumento gubernamental para transmitir las bondades de una revolución a la que llaman ciudadana? ¿Habrán pagado derechos de autor?

Ingenuo yo que pensaba que había canciones con las que nadie debería meterse. !Qué sacrilegio!.

No digo más