El año se murió el domingo y con él se fueron los malos momentos y todo lo malo que nos haya pasado. Personalmente llené mi monigote con unas cuantas malas decisiones, un par de personas a las que nunca debí conocer, un profesor, una mala nota, muchas ausencias, una gastritis, un dolor de garganta, amigos que emigraron, en fin muchas cosas más que no me viene a la mente en este momento.
Pero el año que pasó también me trajo muchas cosas buenas, por las cuales debo agradecer: Buenas notas, gente nueva a la que conocí y con la que comparto mucho actualmente, amigos a los que volví a ver después de mucho tiempo, el año me trajo mas saber, mayor experiencia, mas comida y menos dieta, cero alcohol, la satisfacción del deber cumplido, el sentir que SI SE PUEDE.
Al País: esperanza, alegría, un mundial lleno de emociones, un reconocimiento, una caducidad esperada, un TLC estancado, un Méndez inspirado, aspersiones no deseadas, incidentes diplomáticos, escándalos judiciales inaceptables, una corte suprema nueva, unas elecciones candentes, un presidente esperanzador, etc. etc. etc.
Quiero pensar en el 2007 como el año de la esperanza, el año en el que las personas que componen este país van a trabajar para el cambio. El nuevo año es el mejor pretexto para revisar nuestras metas, y establecer nuevos objetivos a corto plazo, no olvidemos que habrá nuevo gobierno y que el presidente no es tan fuerte como para cambiar todo solo ni ninguno de nosotros es tan débil como para no aportar al cambio.
Que el año que se fue se lleve consigo las guerras en medio oriente, que se quemen los mentirosos que ocultan sus verdaderas intenciones creando caos y muerte por doquier. que el año se lleve consigo las catástrofes naturales, los terroristas, y los líderes que no contemplan mas verdad que la suya y que llevan al fanatismo a sus seguidores. Que el mundo sea otro, sé que es pedir mucho pero me gusta pensar que es posible.
En el corazón de todos los inviernos vive una primavera palpitante, y detrás de cada noche, viene una aurora sonriente.
Khalil Gibran
FELIZ AÑO NUEVO.
Pero el año que pasó también me trajo muchas cosas buenas, por las cuales debo agradecer: Buenas notas, gente nueva a la que conocí y con la que comparto mucho actualmente, amigos a los que volví a ver después de mucho tiempo, el año me trajo mas saber, mayor experiencia, mas comida y menos dieta, cero alcohol, la satisfacción del deber cumplido, el sentir que SI SE PUEDE.
Al País: esperanza, alegría, un mundial lleno de emociones, un reconocimiento, una caducidad esperada, un TLC estancado, un Méndez inspirado, aspersiones no deseadas, incidentes diplomáticos, escándalos judiciales inaceptables, una corte suprema nueva, unas elecciones candentes, un presidente esperanzador, etc. etc. etc.
Quiero pensar en el 2007 como el año de la esperanza, el año en el que las personas que componen este país van a trabajar para el cambio. El nuevo año es el mejor pretexto para revisar nuestras metas, y establecer nuevos objetivos a corto plazo, no olvidemos que habrá nuevo gobierno y que el presidente no es tan fuerte como para cambiar todo solo ni ninguno de nosotros es tan débil como para no aportar al cambio.
Que el año que se fue se lleve consigo las guerras en medio oriente, que se quemen los mentirosos que ocultan sus verdaderas intenciones creando caos y muerte por doquier. que el año se lleve consigo las catástrofes naturales, los terroristas, y los líderes que no contemplan mas verdad que la suya y que llevan al fanatismo a sus seguidores. Que el mundo sea otro, sé que es pedir mucho pero me gusta pensar que es posible.
En el corazón de todos los inviernos vive una primavera palpitante, y detrás de cada noche, viene una aurora sonriente.
Khalil Gibran
FELIZ AÑO NUEVO.
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