La mujer que se fue
dejó una marca lúgubre en mi carne
de esas que deja un corazón de fuego
cuando es todo lujuria
cuando es todo deseo.
La mujer que se fue
me amó de tal manera que mis huesos
estallan de ausencia ante su ropa
vacía de sus quejas
vacía de su cuerpo.
Quién fuiste entre mis prendas?
entremezclada y fija en mi coraza
estremecida de dolor, herida
por el tiempo indolente
que acabó con nuestra fe.
Ajena a la nostalgia
Supe quererte con delirio, quise
con un amor supremo con un amor
que nadie entendería
con un amor de loco.
Y hoy pongo a tu merced mis primaveras
mis años son espinas sin tus besos
las cartas del ayer son lastimeras
y tu solo recuerdo me desnuda
y me abandona herido ante tu ausencia.
La mujer que se fue
aun me visita en noches como esta
me importuna y me acecha cual ladrona
que asalta mi calma
que oculta su mal y me derrota.
1 comentario:
Tienes mucha inspiración y escribes re lindo, espero que sigas así.
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