enero 28, 2009

Rutina

Echo un vistazo a mi alrededor y solo veo papeles, archivos, carpetas, calculadoras y cuadernos: estoy cansado. La contabilidad es cualquier cosa menos divertida, los activos y los pasivos se mezclan en mí como un rompecabezas emocional que no tiene solución. Los gastos no tienen justificación y son grandes, muy grandes.. aunque no tan grandes como las ganas que tengo de salir corriendo.

Un día y otro día, sumo horas de trabajo y entusiasmado espero las quincenas, pero el dinero solo pasa a otras manos. La frustración se apodera de mí como un espíritu chocarrero que solo rompe platos pero que no hace mal porque al final del día no tomo ninguna decisión importante, solo continúo.

Entonces sumo otro día de rutina y resto puntos a la creatividad. Empiezo a leer, a escribir, me olvido de la crisis mundial y borró de mi disco duro la finanzas y los balances de fin de año. Escribo poemas, canciones, leo libros recomendados, columnas interesantes, trato de inventar algo nuevo, busco oportunidades. Pero nada, solo incertidumbre.

Hoy sufro las consecuencias de las malas decisiones del pasado. Tengo que sobreponerme, Tengo fe en Dios, y en mí, Pero tengo un desánimo terrible, intentaré que éste no pese más que mi voluntad. También intentaré no escribir cosas como estas aunque cada vez termine haciéndolo de igual manera.

1 comentario:

HIPATIA VEINTIMILLA dijo...

Yo crEo q las dEcIsIoNEs NuNCa vaN A SeR mAlaS..SiMpLeMenTYe sOn OpoRtUnIdAdES PaRa cREcEr Y SEGuiR MEjOrAnDo...El mEjOr caMiNo DeL sEr hUmAnO Es AquEl q le EnseñA A VAlOrAr lo q pErDiÓ Y Lo QUe tIeNe..y LaS PéRdIdAs O TRoPiEzOs cOmo quIErAs llAmArlO sOn uN EScALOn pARA SegUiR aDeLaNt..;)